Entradas

Mostrando entradas de noviembre, 2012

Adolescentes y ETS: La Verdad Desnuda

Imagen
Hay datos que no se oyen con frecuencia, realidades que no se cuentan completas, verdades que los adolescentes, padres y profesores debieran conocer respecto a las enfermedades de transmisión sexual (ETS). Datos como los que se encuentran en el libro “La Verdad Desnuda” de Josh McDowell, y del cual transcribo unas cuantas citas:

La crisis de la iglesia

Imagen
Dicen que tienen un mismo Padre y son hermanos, pero hay divisiones entre ellos. Unos siguen a uno y otros forman otro grupo. Obispos y pastores que se envanecen y se creen mejores, en ocasiones con el único interés de apropiarse de cargos y hasta de dinero. Los hermanos hablan enérgicamente en contra del pecado y la impureza del mundo, pero la inmoralidad sexual está presente en su congregación (adulterio, fornicación, incluso uno le quitó la mujer a su propio padre). Tienen problemas en sus matrimonios, tienen pleitos entre hermanos. Han llegado a ir a juicio por asuntos de negocios y propiedades, peleando ante un juez porque no fueron capaces de llegar a un acuerdo. Pero eso sí, son muy religiosos, cumplen con las costumbres de vestir y orar. Unos se jactan de tener mucho conocimiento bíblico y “defender la iglesia”; otros se jactan de orar mucho y tener grandes dones espirituales, hacer milagros, tener visiones y “hablar en lenguas”; pero es notorio que les falta lo más important

Caricaturas de Dios (II)

Imagen
La conducta de un cristiano revela el Dios en el que cree. Un buen concepto de Dios condicionará una sana relación con él. En cambio, un concepto deformado de Dios producirá una caricatura de él y una conducta errada. Cuando un creyente sólo busca a Dios para que lo saque de problemas, lo caricaturiza como un todopoderoso extintor , un dispositivo que se usa “sólo en caso de emergencia”. O un Dios que existe sólo para ayudar y conceder deseos tal como lo hace el genio de la lámpara maravillosa a quien se lo “libera” para que conceda un milagro sea de amor, salud o dinero. Pero cuando pasa el temblor y desaparece el problema, “desaparece” también este Dios, para esconderlo y seguir viviendo como si él no existiera. Claro, hasta que se lo necesite para solucionar otro problema.

Caricaturas de Dios (I)

Imagen
Una caricatura es por definición, un “dibujo satírico en que se deforman las facciones y el aspecto de alguien”, o una “obra de arte que ridiculiza o toma en broma el modelo que tiene por objeto” (RAE). En tal sentido podemos hablar de las muchas “caricaturas de Dios” que hay en el mundo, no necesariamente hechos por personas ateas (quienes pueden ridiculizar a Dios con intención), sino por cristianos, que por un escaso conocimiento bíblico (o por conveniencia) tienen conceptos deformados de Dios, sea porque exageran o minimizan ciertos atributos y acciones. Veamos algunas de esas “caricaturas”: El Dios “viejito” (el más popular),  canoso de cabellos largos, con túnica blanca y el infaltable triángulo sobre la cabeza. Sabio y eterno, lejos, allá entre las nubes, sentado sobre un gran trono, pero con la apariencia de “haber vivido demasiado”, sin más fuerzas, cansado, anticuado y hasta aburrido. Si bien la Biblia muestra a Dios como sabio y eterno, también declara que en él “no ha

Cuidado con el Otro Evangelio

Imagen
Hay un Evangelio que Jesús proclamó. Un mensaje de “Buenas Noticias” para todos. Sus enseñanzas fueron oídas en las aldeas y las ciudades, en las plazas y las sinagogas, por pobres y ricos. Adiestró a sus discípulos para que a su vez ellos la transmitieran a los nuevos discípulos. Pero no pasó mucho tiempo del inicio de la Iglesia Cristiana, que Otro Evangelio apareció. Parecía ser el mismo pero contenía una variante sutil y peligrosa. Era el Evangelio de falsos maestros cristianos de origen judío que enseñaban que ninguno podía ser perdonado por Dios y recibir la salvación de Jesús (un Mesías judío) si primero no se convertía al judaísmo por medio de la circuncisión y el cumplimiento de la Ley de Moisés. Era una “añadidura” al Evangelio del perdón por la fe, que llevó a confusión, a discusiones y hasta divisiones entre los creyentes de Galacia pues algunos de ellos estaban siendo obligados a someterse a estos rituales.